lunes, 26 de noviembre de 2018

Reescribir la historia: “Noni” Landaburu


   La historia es un terreno en disputa. Los hechos, los nombres, los criterios, son campos de lucha para una sociedad que reconstruye su identidad nacional a través de la historia oficial pero también del relato popular y la memoria colectiva. Por eso la dictadura cívico-militar acuñó con tanta frialdad este concepto de desaparecido: “No están ni vivos ni muertos, están desaparecidos” decía muy suelto el asesino que asaltó el poder el 1976 y que, gracias a una política  estatal de Derechos Humanos y a los que nunca bajaron los brazos, murió en la cárcel, pagando su condena judicial.
   Por esto mismo es que resulta de vital importancia la reparación histórica que se llevó a cabo en el Instituto Superior de Educación Física Nª 1 “Romero Brest” de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires durante el mes de octubre de este año. Por impulso de lxs estudiantes y un grupo de profesorxs, el consejo directivo aprobó que se inicien las gestiones para cambiar la situación de revista de la Profesora Leonor Rosario Landaburu Zavaleta de Catnich más conocida como “Noni”. Aunque parezca increíble, en el legajo de la docente en el Romero,  aún figuraba como “AUSENTE”, por no haberse reintegrado al finalizar la licencia por embarazo que tomó el 11 de agosto de 1977. Esta falacia administrativa ocultaba él terrible hecho de que la profesora de psicología y filosofía del ISEF había sido secuestrada el 31 de agosto de ese mismo año en horas de la noche en su domicilio de Caseros (Prov. De Bs.As.)  por un grupo de tareas del gobierno represor. Nunca más se encontró su cuerpo ni se supo que pasó con el niño que llevaba en su vientre.
  Tuvieron que pasar muchos años para que esta injusticia se pudiera revertir aunque sea simbólicamente cambiando en su legajo el “AUSENTE” por el de “DESAPARECIDA”, y como no podía ser de otra manera, la memoria de la profesora fue recuperada por lxs jóvenes. Esxs jóvenes nacidos en democracia que aprendieron de las Madres y de las Abuelas que un pueblo sin memoria es un pueblo frágil, manoseable, que mantener viva la memoria es una forma de hacer justicia y al mismo tiempo una oportunidad para mover las estructuras conservadoras, individualistas y discriminatorias que aún siguen presentes en algunas instituciones.
   Pero la comunidad educativa del Romero no se quedó ahí y en un contexto donde la identidad colectiva resiste a los embates de los negociados inmobiliarios del gobierno porteño, lxs docentes decidieron nombrar a la sala de profesores con el nombre de la colega puntana que llegó a la ciudad de Buenos Aires escapando de la persecución de los genocidas que en él 76 habían asesinado a su hermana y que luego se la llevarían a ella y a su bebe,  y que durante su breve recorrido en él ISEF  logró dejar una huella en sus compañeros y estudiantes.
   Con la memoria viva de nuestros compañeros y compañeras docentes desaparecidos, con la energía de la juventud que resiste un nuevo intento de traslado y con la mirada puesta en las luchas que vendrán, hoy y siempre, la comunidad del Romero Brest gritamos: 30 mil compañeros detenidos desaparecidos… PRESENTES AHORA Y SIEMPRE!!!

Nahuel Maciel
Subsecretaría de la Juventud. ADEF        
       
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